680 308 131 info@metalhome.es

Cuando se trata de proteger los espacios exteriores, los toldos son una solución práctica y estética que nos resguarda tanto del sol como de la lluvia.

Sin embargo, no todos los toldos están diseñados para enfrentar igualmente las inclemencias del tiempo, y es importante saber cómo manejar esta estructura cuando el clima se torna adverso.

Este artículo explora las medidas esenciales que debemos considerar al usar toldos durante la lluvia, asegurando su durabilidad y funcionalidad. ¿Cuándo es recomendable recogerlos y qué hacer si se mojan, para mantenerlos en el mejor estado posible?

¿Cuándo llueve hay que recoger el toldo?

La decisión de si recoger o no un toldo cuando empieza a llover depende de varios factores, incluyendo el tipo de toldo, la intensidad de la lluvia y las condiciones específicas del clima. Los toldos están diseñados principalmente para ofrecer sombra y protección contra el sol, pero muchos modelos también son capaces de resistir diferentes tipos de precipitaciones.

Para toldos no diseñados específicamente para lluvia, una llovizna ligera o una lluvia breve y no muy intensa no debería representar un problema significativo; estos toldos pueden permanecer desplegados ya que las lluvias menores no suelen afectar la integridad estructural del toldo.

qué-hacer-con-el-toldo-si-llueve

Sin embargo, en situaciones de lluvias fuertes o persistentes, es prudente recoger el toldo. Esto se debe a que el peso del agua acumulada podría estresar y dañar tanto el tejido como la estructura de soporte.

Es importante también considerar los materiales del toldo. Los fabricados con lonas acrílicas impermeables o tratadas con resinas protectoras están mejor equipados para manejar la humedad sin sufrir daños. No obstante, incluso estos toldos deben ser manejados con cuidado y según las recomendaciones del fabricante.

Además, la previsión meteorológica es una herramienta valiosa en esta decisión. Estar al tanto del pronóstico puede permitirnos anticipar y actuar acorde a las condiciones climáticas esperadas, protegiendo así nuestra inversión.

Aunque algunos toldos pueden soportar la lluvia sin problemas, la precaución nunca está de más para asegurar su longevidad y estética.

¿Qué pasa si se mojan los toldos?

¿Qué hacer si se moja el toldo? Cuando un toldo se moja, especialmente si no está diseñado para resistir fuertes lluvias, varios problemas pueden surgir. La humedad puede afectar la tela y la estructura del toldo de diversas maneras, desde la pérdida de color y forma hasta la aparición de moho y hongos, en este artículo vimos como limpiar un toldo.

El primer paso al tratar con un toldo mojado es evaluar el grado de humedad y el tipo de agua que ha afectado la tela. Agua con barro puede requerir una limpieza más profunda para evitar manchas permanentes o daños en el tejido.

La mayoría de los toldos necesitarán ser desplegados completamente para secar en un área bien ventilada, evitando así la acumulación de humedad en las fibras del material.

Si el toldo se recoge mientras está mojado, es importante desplegarlo nuevamente tan pronto como las condiciones climáticas lo permitan.

Dejar un toldo enrollado y húmedo puede propiciar un ambiente ideal para el crecimiento de moho y la proliferación de bacterias, lo cual no solo puede debilitar y manchar la tela, sino también producir olores desagradables.

En cuanto a la limpieza, si el toldo ha sido sometido a una lluvia intensa o está visiblemente sucio, una limpieza suave con productos recomendados por el fabricante puede ser necesaria. Esto debería hacerse solo cuando el toldo esté completamente seco para evitar dañar los materiales.

El cuidado adecuado después de que un toldo se moje es esencial para preservar su funcionalidad y estética. La atención oportuna a la limpieza y el secado puede prolongar significativamente la vida útil del toldo, manteniéndolo como una parte valiosa y funcional de tu espacio exterior.