No cabe duda que la calidad de vida en el hogar va más allá del diseño interior y la decoración. La eficiencia acústica es un factor primordial que puede influir en la comodidad y bienestar dentro de la vivienda.
Si bien la paz y tranquilidad del hogar pueden verse comprometidas por el ruido exterior existen soluciones que permiten recuperar esa tranquilidad.
Este artículo hablaremos sobre la elección de los materiales más adecuados, principalmente el vidrio, que ayudan a aislar el ruido de sus ventanas eficazmente. De este modo disfrutar de un ambiente tranquilo en casa sin importar el bullicio del exterior.
¿Qué usar en las ventanas para aislar el ruido?
El aislamiento acústico de las ventanas es un asunto de múltiples dimensiones que combina el vidrio, el marco y los sellos, así como el tipo de apertura y cierre de la ventana. Algunos elementos son más críticos que otros para asegurar la eficacia del aislamiento.
- El vidrio es un componente crucial. Un vidrio de doble acristalamiento instalada en ventana con al menos uno de los vidrios con un espesor mínimo de 6 milímetros y una cámara de aire de al menos 12 milímetros puede proporcionar un buen aislamiento acústico. El uso de vidrios laminados puede mejorar aún más el aislamiento acústico debido a su capacidad para amortiguar las vibraciones sonoras.
- Los marcos de las ventanas deben ser de calidad y deben sellarse adecuadamente para prevenir la filtración de ruido. Los marcos de PVC son particularmente efectivos gracias a sus propiedades de absorción de sonido.
- El tipo de apertura de la ventana también juega un papel en el aislamiento acústico. Las ventanas abatibles gracias a su cierre de doble junta suelen ofrecer un mejor rendimiento en términos de aislamiento acústico en comparación con las ventanas correderas.
Además de estos elementos básicos existen soluciones adicionales como la instalación de cortinas pesadas de tela gruesa y el sellado de fisuras y juntas que pueden ayudar a reducir aún más el ruido.
¿Qué vidrio aísla más el sonido, el templado o el laminado?
El vidrio es un elemento fundamental en el aislamiento acústico de las ventanas. Entre las diferentes opciones disponibles, el vidrio templado y el vidrio laminado son dos de las más populares. Sin embargo, ¿cuál de los dos proporciona una mayor capacidad de aislamiento acústico?
El vidrio templado aunque es más resistente a los impactos y las variaciones de temperatura no es necesariamente la mejor opción para el aislamiento acústico. Esto se debe a que a pesar de su resistencia no tiene la misma capacidad para amortiguar el sonido que el vidrio laminado.
El vidrio laminado se compone de dos o más láminas de vidrio unidas por una o varias capas de PVB (Polivinilo butiral) o EVA (Etileno vinil acetato). Esta estructura no sólo proporciona resistencia al impacto sino que también ayuda a reducir la transmisión de ruido. El material intercalado actúa como una barrera y absorbe la energía sonora reduciendo la cantidad de ruido que atraviesa el vidrio.
Por tanto en términos de aislamiento acústico el vidrio laminado suele ser la opción más efectiva. No obstante, es importante tener en cuenta que el espesor del vidrio y el tipo de intercalado también pueden influir en la capacidad de aislamiento acústico del vidrio.
Soluciones de carpintería en aluminio y PVC para mejorar el aislamiento acústico de las ventanas
La cerrajería y carpintería en aluminio y PVC juega un papel importante en la mejora del aislamiento acústico de las ventanas. Un buen sistema de cierre puede minimizar las filtraciones de ruido manteniendo el ambiente interior tranquilo y confortable.
Una opción es optar por sistemas de cierre con doble junta comúnmente encontrados en las ventanas abatibles. Estos cierres tienen dos niveles de sellado lo que minimiza las posibilidades de filtración de ruido.
Además los sistemas de cierre multipunto donde la ventana se cierra en varios lugares también pueden contribuir a un mejor aislamiento acústico ya que aseguran un cierre más hermético de la ventana.
Otra solución pasa por el uso de burletes de goma autoadhesivos para sellar las juntas de las hojas de las ventanas. Estos aislantes se colocan tanto entre las hojas de la ventana y el marco como en las juntas de las hojas contribuyendo a un mayor aislamiento del ruido exterior.
La revisión y mantenimiento regulares de la carpintería de las ventanas es esencial para garantizar su funcionamiento óptimo.
Con el tiempo los sellos pueden deteriorarse y los mecanismos de cierre pueden desajustarse lo que puede comprometer la eficacia del aislamiento acústico. Mantener las ventanas en buen estado de funcionamiento contribuirá significativamente a un hogar más silencioso y confortable.